"Tu sangre es la mañana que jamás se termina" (Miguel Hernández)
2. La primera ecografía
Ese retrato maravilloso
de tu incipiente anatomía.
Ese paisaje uterino
de desbordante energía.
Esa acuarela gozosa
de tu dubitativa fisonomía.
Ese mapa preciso
de tu abstracta geometría.
Ese collage grandioso
de monumental monocromía.
Ese pequeño paraíso
de singular armonía.
Esa pequeña gran cosa
que aleja a la melancolía,
que se va abriendo camino
hasta que llegue el gran día.
1 comentario:
Y lo que nos queda por leer y disfrutar cuando tengas a esa cosita en las manos...un besico a los dos.
Anacris.
Publicar un comentario