martes, septiembre 10, 2013

Y mañana...

Y mañana será 11 de septiembre, una fecha que parece haber sido elegida por la Historia para que en ella confluyan varias efemérides, algunas de ellas funestas, terribles, que marcaron a la humanidad para siempre...
El 11 de septiembre de 1973, el general Pinochet asumía el poder en Chile tras un golpe de estado. El presidente Salvador Allende, elegido democráticamente,  murió durante el asalto de los militares al Palacio de la Moneda. La terrible represión que siguió al golpe, los desaparecidos, los torturados, la sistemática violación de los derechos humanos...la historia de Chile empezó a escribir una de sus páginas más oscuras. Pinochet murió rodeado de sus familiares, muchos de los que sufrieron bajo su yugo implacable no podrán decir lo mismo.
El 11 de septiembre de 2001, Los Estados Unidos de América sufrían el mayor atentado de su (reciente) historia con casi 3000 muertos. Las Torres Gemelas, icónicas torres de New York, quedaban reducidas a escombros tras el impacto de dos aviones secuestrados por comandos de Al-Qaeda. El Pentágono, en Washington, era impactado por otra aeronave y un cuarto avión se estrelló en Pensilvania. La acción heróica de los pasajeros de ese avión evitó que se estrellara contra otro edificio gubernamental. Eso sí, todos ellos junto con los terroristas murieron en el acto. El 11 de septiembre causó tanto impacto porque se pudo ver en directo, como los aviones se estrellaban contra las Torres, como éstas ardían, como había gente que se arrojaba al vacío y como, por último, se derrumbaban como un castillo de naipes. Causó tanto impacto porque si el país más poderoso del mundo sufría tal ataque, la sensación de inseguridad e indefensión que se creó a partir de entonces fue enorme y aún perdura. Causó tanto impacto que países aliados de USA, también sufrieron en sus carnes atentados atroces, países cuyos gobernantes de entonces queriéndose subir al carro del líder apoyaron una guerra ilegal basada en mentiras. Uno de esos Gobernantes, cuando un once de marzo de 2004 estallaron varios trenes en su país, se apresuró a negar que la causa de tales atentados fue el apoyo a los EE.UU. y a contar una sarta de mentiras con tal de salvar el culo. Afortunadamente, no coló.
Y mañana es 11 de septiembre y el sol saldrá a las 5:52 de la mañana y se pondrá a la 18:30...



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