Pequeño relato

"Tenía la mirada perdida, ni siquiera me reconoció. Me preguntó: ¿Tú quien eres? mientras volvía a emitir esos gemidos lastimeros que me estremecían el alma. La tenía entre mis brazos pero la sentía tan lejos. No paraba de llorar y yo no sabía muy bien que hacer en esa situación. De repente,el llanto cesaba, ella miraba a su alrededor como si buscase a alguien y llamaba a su madre pero nadie respondía y volvían las lágrimas y los gemidos. Y así pasaban los minutos, yo tratando que ella volviese en sí, tratando que viera que su hijo estaba a su lado, que por mucho que llamara a su madre, a mi abuela, ella no iba a volver, que todo lo que había sucedido en un relativo intervalo breve de tiempo ya no podía cambiarse. Ella nunca podría imaginar que algunas personas que motivaron su viaje al mundo de las sombras sobrevivieran a su propia muerte. Ni siquiera yo, que la vi en esos momentos tan bajos, pensé que la iba a perder apenas unos años después..."