miércoles, agosto 11, 2010

Londres, séptimo día

Mañana de mercadillo, pero qué mercadillo oiga. The Camden Market trasciende el típico concepto de "rastro". Allí hay puestos, tiendas tal cual...Las fachadas de muchas de ellas están decoradas de una manera muy original. Hay que dedicarle tiempo a Camden porque la cantidad de puestos y de callejuelas que hay parece ilimitada. La zona es atravesada por un canal, lo que le da un encanto aún más especial si cabe. Imposible salir de allí sin hacer alguna compra, ¡es que hay de todo!
Al mediodía, casi por la tarde ya, volvimos a la National Gallery para admirar con más calma las obras allí expuestas.
Y llegó el momento. Yo tenía muy claro donde ir pero no se lo dije a Ana. Simplemente le "sugerí" por donde podíamos pasear por la noche. La elegante Regents Street se abría ante nuestras ojos con la mayoría de las tiendas cerradas, era domingo, y de repente me desvié a la izquierda hacia una callejuela que no tenía ningún atractivo. Un giro a la derecha más y ahí estaba...
Ana me preguntó: -¿Dónde estamos?-
-Saville Row, número 3 donde Los Beatles actuaron por última vez, cariño-
La verdad es que el edificio parece estar semiabandonado y no había ninguna placa que recordase el evento(y es que Londres está lleno de placas que indica que en aquella casa nació, vivió, trabajó o murió tal personaje famoso) pero vamos que a mi nadie me quitó la ilusión de imaginarme a mis cuatro de Liverpool tocando en la azotea de ese edificio...
Y en el próximo artículo...de reyes, reinas, poetas y escritores en general...

No hay comentarios: